Mi cocina no es alta cocina pero si es cocina alta debido a mi estatura, tampoco es cocina de diseño, pero si de investigación , de investigación a ver que puedo hacer con lo que tengo en la nevera.
Por ejemplo hace dos veranos tenía a mi hija y a mi sobrino en el salón del apartamento de la playa, los dos entorno de los 12 años, una edad en la que una de sus frases favoritas ante un plato de comida es ¡No me gusta!
Tenía que prepararles la comida. Pues con ese acechante peligro del no me gusta, pero con mucho valor abrí la nevera, otee el horizonte para ver de que armas disponía y vi unos lomos de salmón que había comprado en la pescadería, a su derecha había dos latas, una de aceitunas rellenas de anchoa y otra de cerveza.
Tuve una intuición y cree el que es mi plato estrella en mi cocina alta, cogí los lomos de salmón y las dos latas y ofreciéndole al salmón el contenido de las dos latas el cual las acepto gustoso cree el ya famoso plato y desde hoy mas, Salmón tomando el aperitivo.
Resumiendo la receta del salmón tomando el aperitivo es:
4 lomos de salmón fresco medianos.
1 lata de aceitunas rellenas de anchoa.
1 lata de cerveza.
2 cucharadas soperas de aceite de oliva.
1/2 cucharadita de ajo molido.
Sal a gusto.
Se ponen los lomos de salmón en una sartén y se le ofrece las aceitunas y la cerveza añadiendo el resto de los condimentos en ese mismo instante y se cuece todo a fuego muy lento para que el salmón coja el gusto al aperitivo.
El éxito del plato fue extraordinario , los niños no dejaron ni salmón ni aperitivo.
En otra ocasión fue a mis padres a quien tenía que agasajarles con mi cocina alta, mi padre acostumbrado a la cocina casera de toda la vida de mi madre era un test muy duro.
Ese día tenía merluza en rodajas en la nevera y a su lado unos encarnados tomates, mire a unas y a otros y los saque de la nevera, cogí los tomates y los corte en rodajas de un dedo de espesor, preparándole una cama de rodajas de tomate en la olla a las rodajas de merluza, así con esa situación tan descansada es como nació mi plato conocido por Pescado de la huerta, también cocinado a fuego lento que no alterase el descanso de la merluza.
El resultado fue satisfactorio, cuando el plato estuvo en la mesa delante de mi padre, lo probo y tras unos interminables segundos de suspense levanto la mirada e hizo un gesto de aprobación que me dejo plenamente reconfortado.
Sigo investigando en mi cocina alta, pero estas son mis dos recetas más famosas.